El 6 de septiembre en Bogotá, Colombia se realizó la ceremonia del Premio Nacional de Derechos Humanos en Colombia. En su XII versión. 

En este evento de premiación Act Iglesia Sueca y Diakonia entregaron a destacados liderazgos sociales, activistas y defensores/as de los derechos humanos de todo el país un reconocimiento por su incansable labor en la promoción y protección de los derechos humanos y las libertades fundamentales.

Es así como en la categoría “Defensor o Defensora del Año», el reconocimiento fue otorgado a Elizabeth Moreno Barco, una valiente luchadora del departamento del Chocó que ha dedicado su vida a la defensa de los derechos de las comunidades étnicas. 

La categoría “Reconocimiento A Toda una Vida» fue entregado a la destacada defensora de derechos humanos, Doria Yanette Bautista, cuya historia está marcada por la desaparición forzada y la búsqueda de su hermana Nydia Erika Bautista en 1987, hecho que la convirtió en una incansable y valiente luchadora aún en los momentos más difíciles de persecución y estigmatización. 

En las categorías a Procesos Colectivos, en el nivel comunitario, el reconocimiento fue otorgado al Consejo Nacional de Paz Afrocolombiano (CONPA), colectivo que ha demostrado ser un espacio de reconocimiento del pueblo negro, afrocolombiano, raizal y palenquero, así como una dedicación excepcional en la promoción de la paz, con un alto nivel de incidencia e interlocución en diseño de políticas públicas en torno a la paz desde un enfoque colectivo y étnico-racial. 

Por su parte, en la Categoría Procesos Colectivos nivel de «ONG Acompañantes», el premio fue otorgado a la Fundación de Derechos Humanos Joel Sierra de Arauca, cuyo trabajo representa la defensa de los derechos humanos brindado apoyo vital a las víctimas.